Los derechos de los inmigrantes y la lucha por las necesidades básicas

Por el Comité Electoral de la Liga por las Necesidades Básicas

Donald Trump es como la descripción de Satanás en la Biblia: *

«Cuando miente, habla su lengua materna, porque es mentiroso y el padre de la mentira.»

La política de inmigración de Trump es una inmensa red de mentiras.  Primero dijo que sólo quería deportar a criminales peligrosos, pero firmó una orden acorralando a los niños.  Dijo que solo quería deportar a los indocumentados, pero les quitó la documentación a cientos de miles de inmigrantes «legales».  Dijo que sólo quería atacar a los inmigrantes, pero dio la orden eliminando el derecho a la ciudadanía por nacimiento.

La lucha contra el fascismo de MAGA nos obliga a forjar la unidad de la clase trabajadora, paso a paso, en toda ocupación, región, demografía e ideología, empezando con los más afectados.  Ellos dicen “divide y vencerás”; nosotros decimos “únete y vencerás”.  Los ataques de la administración son a propósito muy amplios, dificultando saber por dónde empezar la resistencia, pero de hecho está empezando con las personas más afectadas.  En todo el país, han estallado manifestaciones diarias dirigidas por familias de inmigrantes y la juventud—paros escolares, cierres de carreteras, marchas y piquetes.

EL FILO DE LA NAVAJA

Además de atacar a los inmigrantes, la administración está atacando a toda la gente de color, especialmente a los afroamericanos, mediante el desmantelamiento de los programas DEI (Diversidad, Igualdad, Inclusión), el borrado de las bases de datos que identifican a policías asesinos y la cancelación del Mes de la Historia Negra.  Está embistiendo contra las mujeres, las comunidades LGBTQ+ y la clase trabajadora en general mediante ataques a los derechos sindicales, el derecho al voto, los programas de vivienda y Medicaid.  Es importante que la gente, dondequiera esté presente, resista, y lo está haciendo en marchas de mujeres, líneas de piquetes contra Tesla, mítines de Stand Up for Science (Defiende la Ciencia) y movimientos como la campaña de National Nurses United, «Fund Care Not Billionaires» (Financiar la Salud, no a los Multimillonarios).

Pero toda la historia del movimiento MAGA desde 2015 muestra que el filo del ataque es la ofensiva contra los migrantes.  El verdadero objetivo del movimiento antiinmigración no es detener la migración, sino más bien:

•negar derechos a los trabajadores migrantes que ya están aquí, para que los empresarios y propietarios puedan explotarlos más y obtener aún mayores beneficios y

•desviar a los trabajadores que luchan por sus necesidades básicas y dividir al movimiento obrero, haciendo difícil o imposible resistir los ataques que la clase multimillonaria está fraguando contra todo trabajador.

Los sectores más avanzados y decididos del movimiento obrero entienden esto y están superando los obstáculos que han bloqueado la unidad de clase históricamente.  Comprenden que la creciente polarización económica está empobreciendo como nunca a los trabajadores sin distinción de su color y están haciendo sonar la alarma de que el ataque contra los inmigrantes es un ataque contra todos.

Como afirma Housing Now!, una coalición en California de inquilinos y organizaciones que defienden el derecho a la vivienda, «El acceso a una vivienda asequible y de calidad para todos es fundamental para la salud y la vitalidad de las comunidades de California, incluyendo a familias inmigrantes, que ya soportan una carga de alquiler desigual.  A medida que seguimos adelante, Housing Now! permanece vigilante colaborando en todos los niveles con organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes y rechazando resueltamente las políticas dañinas del presidente Trump, que buscan dividir y desestabilizar a nuestras comunidades.»

CONSTRUIR LA UNIDAD

Han surgido redes de respuesta rápida en todo el país, tanto así que el director del ICE, Tom Homan, amenaza con detener a quienes informen a los migrantes sobre sus derechos constitucionales.  Cuando los migrantes comprenden sus derechos, se frenan muchísimo las deportaciones, sobre todo en Chicago, donde el ICE intentó llevar a cabo sus primeras detenciones masivas.  Conscientes de la huelga de maestros prevista para la primavera, los super millonarios están tratando de dividir a la clase trabajadora de Chicago en torno a la defensa de los derechos de los inmigrantes por parte alcalde Brandon Johnson.

En Los Ángeles, gente de toda la ciudad se está uniendo en una coalición llamada «Lash Out» (¡Pelea!) que resiste los ataques a los inmigrantes, a los sin techo y a los grupos de ayuda mutua que los asisten.  Un trabajador de ayuda mutua denunció haber sido acosado e interrogado por un representante del ayuntamiento—con la policía rondando en el fondo—sólo por aparecer con café y donas en una barrida de campamentos de personas sin hogar.  La gente que participa en las manifestaciones diarias contra el ICE también está apoyando el movimiento para la protección de inquilinos y la indemnización de las personas que perdieron ingresos debido a los incendios forestales de enero.

En Oakland, la resistencia a los severos recortes presupuestarios locales, las redadas de campamentos de desalojados y los ataques a personas mayores e inquilinos se está uniendo a la defensa de los inmigrantes contra las deportaciones masivas.  «Los inquilinos son trabajadores y muchos de ellos son inmigrantes», afirmó un dirigente.  «Nuestros sindicatos y organizaciones de vivienda están empezando a salir de su aislamiento y a considerar los problemas de la comunidad.  Toda esta resistencia está sacando al genio de la botella».

A DEFENDER LAS CIUDADES SANTUARIO

Las órdenes ilegales de eliminar la financiación a las ciudades y agencias santuario y «DEI» son enormemente graves.  Cuando se implementen, es muy posible que priven a millones de personas de cuidado médico y arrojen a millones a la calle.  Son un intento de enfrentar a las personas los unos contra los otros justo cuando la batalla por las necesidades básicas se vuelve desesperante.

La defensa de los inmigrantes es el choque inicial de la guerra que se avecina para defender a la clase obrera en general.  La unidad de clase en la lucha por las necesidades básicas es un factor decisivo.  Determinará el éxito o el fracaso de todo el movimiento de resistencia.  Si el movimiento por las necesidades básicas puede avanzar unido, todo el gran movimiento en defensa de la democracia—los miles en las manifestaciones anti-Tesla y anti-Trump—se mantendrá en pie.

Estados Unidos es la sociedad más rica de la historia del mundo.  Es cruel e innecesario que cualquier persona del pueblo tenga que sufrir la falta de un hogar y privaciones para enriquecer aún más a la clase super millonaria.  Sólo la ceguera moral y una falta de visión social nos impiden garantizar la vivienda y el cuidado de la salud para todos.  Como dijo el Dr. Martin Luther King:  «La pobreza no tiene nada de nuevo.  Lo que es nuevo es que tenemos las técnicas y los recursos para librarnos de ella.  La verdadera cuestión es si tenemos la voluntad».

* Juan 8:44 Nueva Versión Internacional